miércoles, 12 de diciembre de 2007

Mensaje Al Equipo.

Rosario, 10 de Diciembre de 2007

Querido Equipo:

Decidí escribir este mensaje de cierre del año por dos razones. En primer lugar, recuperar el valor de la palabra escrita como expresión: mensaje directo (express) y claro / explícito (exprimido). En segundo lugar, como modo de evaluación de gestión y de fijación de nuevas metas.

El año 2007 ha sido un muy buen año y con un muy buen cierre Para NOSOTROS AAAB. Por eso, debo agradecerles e invitarlos a festejar y celebrar. Nuestro equipo se empieza a consolidar como así también algunos procesos.

Sin embargo, “el que nos evalúen como buenos no quiere necesariamente decir que estamos agregando valor”. En otras palabras, lo que nos trajo hasta acá (ordenado, positivo, valorado) no nos garantiza el futuro. Permítanme enumerar algunas cosas que tenemos que seguir mejorando.

Ser activistas creíbles supone más proactividad, ir a buscar, tomar riesgos, sostener con actitud. Hacerlo más allá del “mandato” o de la “chapa”. Hacerlo por convicción. Creer es un verbo “activo” del cual pueden desprenderse, como mínimo, tres conductas: crédulo (un tanto ingenuo o naive); creído (arrogante, que se la cree) y creyente. Me quedo con esta última. Ser creyentes: en nosotros mismos, en los demás, en un proyecto.

Continuar y profundizar la gestión del cambio. Fundamentalmente el cambio cultural en la AAAB. Todo cambio exterior no es más que la expresión de un cambio interior. Por eso los invito a adherir a una cultura que exprese: carácter y optimismo, responsabilidad, coraje (en el sentido de atreverse a arriesgar y no temer a equivocarse), perseverancia y humildad (dice Alex Rovira, autor de La buena suerte: “Te podés volver un imbécil después de un éxito”).

Espero un 2008 pleno de desafíos y de logros. Lo creo posible porque sé que cuento con un equipo sólido.



Gracias
Adrian Tortorelli